Un barco tiene una iglesia jubilar en ocasión del Jubileo 2025

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El "Amerigo Vespucci": del mar a la fe

El emblemático buque de la Armada italiana, “Amerigo Vespucci”, conocido mundialmente por su majestuoso diseño de tres mástiles y su rol como embajador cultural, emprenderá en 2025 una nueva travesía como símbolo de fe. Declarado oficialmente como «Iglesia del Jubileo» por el arzobispo Santo Marcianò, del Ordinariato Militar Italiano, el histórico velero ofrecerá consuelo espiritual a peregrinos en busca de indulgencias plenarias durante el Año Santo.

Un santuario flotante

Construido en 1931, el “Amerigo Vespucci” ha sido durante décadas un buque escuela y un símbolo del patrimonio naval italiano. Desde 2023 recorre el mundo, visitando puertos en los cinco continentes. Ahora, asume un propósito adicional: convertirse en un santuario itinerante donde se celebren actos de devoción, oración y reflexión.

“El Año Jubilar nos invita a renovar la esperanza”, declaró el arzobispo Marcianò al designar el barco como lugar sagrado. “¿Y qué mejor símbolo que un velero que une culturas y religiones, llevando un mensaje de paz por el mundo?”

A diferencia de los templos tradicionales, el “Amerigo Vespucci” ofrece un espacio único y profundamente simbólico para la renovación espiritual. Durante sus escalas previstas hasta diciembre de 2025, los peregrinos podrán participar en misas celebradas por capellanes católicos, quienes por años han acompañado espiritualmente a la tripulación del barco. Según Marcianò, estos capellanes “han nutrido la fe de los marineros de manera silenciosa y efectiva, y ahora extienden su misión a peregrinos de todo el mundo”.

Fe y peregrinación en el Año Santo

La designación del buque como «Iglesia del Jubileo» refleja los temas centrales del Año Santo: peregrinación y reconciliación. Los fieles pueden obtener indulgencias plenarias a través de actos de fe como visitas a lugares sagrados, obras de misericordia o incluso absteniéndose del uso de redes sociales. Ahora, el “Amerigo Vespucci” se suma a esta lista de destinos extraordinarios, combinando su herencia naval con una misión espiritual.

Durante la inauguración del Año Santo para el Ordinariato Militar, el arzobispo Marcianò subrayó la importancia del perdón como motor de cambio y de paz. “El camino hacia el perdón comienza en nosotros mismos”, afirmó, aludiendo al paralelismo entre las travesías marítimas y la peregrinación de la fe. Instó a los creyentes a usar este Jubileo como una oportunidad para profundizar su relación con Dios y renovar su compromiso con la justicia y la paz.

Una red jubilar y el Jubileo de las Fuerzas Armadas

El “Amerigo Vespucci” forma parte de una red de lugares jubilares designados por el Ordinariato Militar, como la Iglesia de Santa Caterina da Siena en Roma, la Capilla del Hospital Militar de Celio y la capilla penitenciaria de Santa Maria Capua Vetere. Misiones internacionales de paz y bases navales también se unirán a las celebraciones, reafirmando el carácter universal del Jubileo.

Un momento destacado será el Jubileo de las Fuerzas Armadas y la Policía, previsto para el 8 y 9 de febrero de 2025 en Roma. Militares de todo el mundo se reunirán en actos que incluirán una ceremonia en una emblemática plaza de la ciudad, un concierto de bandas militares y una peregrinación a la Puerta Santa de la Basílica de San Pedro, que culminará con una misa celebrada por el Papa.