El Divino Justo Juez de Quetzaltenango será restaurado: un acto de fe y preservación patrimonial

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En un acto cargado de profunda devoción, la venerada imagen del Divino Justo Juez, Patrono Jurado de la ciudad de Quetzaltenango, fue trasladada esta semana desde la Catedral Metropolitana de los Altos al Instituto de Antropología e Historia (IDAEH) en la Ciudad de Guatemala. El objetivo: iniciar un proceso integral de conservación y restauración que buscará devolverle su esplendor sin alterar su esencia histórica y espiritual.

Acompañada por miembros de la Hermandad del Divino Justo Juez y numerosos fieles, la imagen fue recibida en la capital con reverencia. Este traslado marca el inicio de una etapa de cuidado profesional que durará aproximadamente ocho meses, tiempo en el cual especialistas del IDAEH trabajarán cuidadosamente para atender los deterioros acumulados por el paso del tiempo y las múltiples procesiones que la imagen ha encabezado a lo largo de los siglos.

Una imagen con siglos de devoción

La escultura del Divino Justo Juez se resguarda en la actual Catedral Metropolitana de los Altos, antigua Parroquia del Espíritu Santo. Se trata de una pieza de altísimo valor artístico y devocional, considerada una de las más antiguas y queridas de la región. Aunque no se ha podido determinar con exactitud la fecha de su creación, expertos la sitúan entre finales del siglo XVI y principios del siglo XVII.

Una tradición oral muy difundida en Quetzaltenango atribuye la obra al escultor español Juan de Aguirre, quien, según se cuenta, la habría tallado en el año 1531. Sin embargo, estudios más recientes ponen en duda esta cronología, ya que las características estilísticas de la imagen sugieren técnicas posteriores a esa fecha, lo que ha abierto un interesante debate entre historiadores y devotos sobre sus verdaderos orígenes.

Música que reza

La devoción al Divino Justo Juez no se limita a lo visual y lo litúrgico. La música también ha sido un canal para expresar el amor y reverencia a esta imagen tan significativa. Diversos compositores han creado marchas fúnebres dedicadas especialmente a Él, siendo algunas de las más destacadas:

• Divino Justo Juez – Roberto Isaac Arango Caballeros (Marcha oficial)
• Justo Eres Señor Mío – Héctor Alfredo Gómez Barillas
• Justo Juez de mis Recuerdos – Carlos Eduardo Quemé Soch
• Soy Tu Siervo, Divino Justo Juez – Carlos Enrique Gómez Figueroa
• Justo y Bendito Seas por Siempre, Señor – Marlon Iván Juárez

Dado que Quetzaltenango es también cuna de la marimba, instrumento que representa el alma musical del pueblo, no podían faltar los sones en marimba dedicados al Divino Justo Juez:

• Eterno Justo Juez – Bayron Francisco Gómez Racancoj
• Venerado Justo Juez – Ronald Joaquín Lucas López
• Divino Maestro Justo Juez – Autor anónimo
• Lágrimas y Tristezas del Divino Justo Juez – Baltazar Cano

Un compromiso con el arte y la fe

La restauración de la imagen del Divino Justo Juez no sólo es un acto de preservación artística, sino también una expresión de profundo respeto a la fe de generaciones de fieles quetzaltecos que han encontrado en Él consuelo, justicia y esperanza. Se espera que, al finalizar el proceso, la imagen regrese a su hogar en la Catedral Metropolitana de los Altos en medio de una celebración solemne y multitudinaria.

Que esta obra de restauración fortalezca la fe del pueblo y asegure que las futuras generaciones continúen encontrando en el Divino Justo Juez la mirada misericordiosa de Cristo Rey.