El crecimiento del islam supera al de todas las religiones entre 2010 y 2020, según estudio

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Un reciente informe del Pew Research Center reveló cambios significativos en la composición religiosa del mundo durante la última década. Aunque el cristianismo se mantuvo como la religión con mayor número de seguidores, el islam fue la religión que más creció entre 2010 y 2020.

El informe, titulado “Cómo cambió el panorama religioso mundial de 2010 a 2020”, se elaboró a partir de datos de más de 2.700 fuentes, incluyendo censos nacionales, encuestas y registros poblacionales. Algunas cifras recién se hicieron disponibles en 2024, debido a los retrasos causados por la pandemia del COVID-19, que afectó los censos en al menos 65 países.

El estudio cubrió 201 naciones y agrupó a la población mundial en siete categorías religiosas principales: cristianos, musulmanes, hindúes, budistas, judíos, personas afiliadas a religiones menos conocidas y quienes no se identifican con ninguna religión.

Según el informe, la población cristiana creció en 122 millones durante la década, alcanzando los 2.300 millones de personas en 2020. Sin embargo, el número de musulmanes creció en 327 millones durante el mismo periodo, situando a esta religión en un total de 2.000 millones de fieles. Esta cifra representa el mayor crecimiento numérico entre todas las religiones analizadas, superando incluso al crecimiento conjunto de todas las demás religiones.

Uno de los aspectos más llamativos del estudio fue el incremento de personas que no se identifican con ninguna religión —los llamados “nones”—, quienes representaban el 24,2% de la población mundial al final de 2020, convirtiéndose en el tercer grupo más grande. Aunque este grupo tiende a tener tasas de fertilidad más bajas y una media de edad más alta, su crecimiento fue impulsado principalmente por el abandono de la identidad religiosa, especialmente entre quienes fueron criados como cristianos.

En países como Estados Unidos, esta tendencia fue particularmente marcada. Durante la década, una gran parte de la población cristiana pasó a considerarse no afiliada religiosamente. A pesar de ello, Pew indica que desde 2020 esta disminución ha comenzado a estabilizarse. En ese año, Estados Unidos tenía la segunda población más grande de personas no religiosas, solo por detrás de China.

Cristianismo: desplazamiento geográfico y cambios regionales

Otro hallazgo notable fue el cambio en la distribución regional de los cristianos. En 2020, el 30,7% de los cristianos vivía en el África subsahariana, en comparación con el 24,8% en 2010. En contraste, Europa —que albergaba a la mayoría de los cristianos en 2010 con un 25,8%— vio disminuir esta proporción debido a la creciente desafiliación religiosa.

Este desplazamiento representa un cambio significativo respecto a principios del siglo XX, cuando los cristianos africanos representaban solo el 1% del total, mientras que dos tercios residían en Europa. El único país donde la proporción de cristianos creció fue Mozambique, con un aumento de cinco puntos porcentuales.

Otros cambios religiosos a nivel mundial

Entre otros hallazgos importantes:

Judíos: su distribución cambió, con el 45,9% residiendo en Medio Oriente y África del Norte, principalmente en Israel, y un 41% en América del Norte. En 2010, la mayoría vivía en América del Norte.

Musulmanes: a pesar de su gran crecimiento global, el porcentaje de musulmanes no cambió significativamente en muchos países, ya que el aumento ocurrió principalmente en regiones donde ya eran mayoría, impulsado por altas tasas de natalidad.

Hindúes: representaron el cuarto grupo más grande, con un crecimiento del 12% a nivel mundial. Su aumento fue especialmente notable en Medio Oriente y África del Norte, aunque la mayoría sigue viviendo en la India. Su proporción global se mantuvo en un 14,9%.

Budistas: fueron el único grupo religioso que disminuyó a nivel mundial, pasando de 343 millones a 324 millones. Esto se debió a la baja tasa de natalidad y a la desafiliación religiosa, sobre todo en Asia Oriental.

Otras religiones: entre ellas bahaíes, jainistas, sijs, taoístas, wiccanos, zoroastrianos, entre otros, crecieron un 12% durante la década. Sin embargo, su proporción mundial se mantuvo estable, alrededor del 2%.

Este informe ofrece una visión general del desarrollo religioso a nivel global y muestra cómo factores sociales, culturales y demográficos influyen en las creencias y prácticas espirituales de las personas.